El calabacín es originario del centro y el Sur de América. Los egípcios, los griegos y los romanos ya consumían calabacines. En la Edad Media los árabes introdujeron el calabacín en los países Mediterráneos.
Cultivo
1. Tierra y fertilización
Los calabacines prefieren suelos profundos y tierras bien abonadas, ricas en humus y aireadas, pero que retengan la humedad.
2. Siembra
La siembra puede ser en semilleros o directa.
3. Trasplante
Se pueden trasplantar los calabacines a la tierra cuando estén bien desarrollados.
4. Mantenimiento
Es importante cortar las hojas viejas con manchas de oídios.
5. Consejos
Se aconseja aportar una buena dosis de compost en cada hoyo y cubrirlos con un buen acolchado de paja.
Plagas
Oídium y mildiu. La planta también puede sufrir podridura de los tallos a nivel de tierra.
Asociaciones
Los calabacines ocupan mucho espacio. Por lo tanto se pueden cultivar juntamente con lechugas que son de ciclo corto. Se desaconseja cultivar los calabacines con espárragos, puerros y tomates.
Propiedades
El calabacín es rico en minerales, sobretodo en potasio, Vitamina C y beta-carotenos. Es un alimento de fácil digestión y con propiedades diuréticas.